domingo, 30 de mayo de 2010


La era está pariendo una Nación.
Por primera vez la versión liberal de la historia no ocupó el centro de la escena. La mirada revisionista generó un espectáculo de una estética descomunal. Los festejos del Bicentenario ya entraron en la historia grande del país como la mayor movilización popular jamás conocida. No sólo por cuántos millones participaron, sino por el lugar, los valores y el discurso con que fueron convocados. Fue una victoria cultural colectiva y una muestra palmaria de la presencia de un Estado con creatividad e iniciativa.
(extraído de MIRADAS AL SUR)

viernes, 7 de mayo de 2010

7 de Mayo de 1919: Nacimiento de Evita









Evita, de evitar
Juan Sasturain, 1986.

Había una vez un verbo
un verbo sin decir/ sin gritar/ un
verbo calladito y sin balcón
un verbito nomás
un verbo más o menos
sin jugar ni conjugar
sin tiempo ni modo
ni voz/ ni vos no yo tampoco
teníamos el verbo:
HABÍA UN SILENCIO ASÍ

Pero el verbo se hizo carne
y habitó (evitó) entre nosotros
EVITA (dijo el verbo)
Evita tú/ evite él/
evitemos nosotros
evitamos —dijo el mosquito—
y la historia araba, evitaba
para él y con nosotros
arrastrados por ella.
Ella, Evita (de evitar)
arrastró por todos
se arrastró (para los arrastradores)
le enrostraron arrastrada
y era verdad (oh mentirosos)
que los llevaba a la rastra
de la nariz/ de los huevos
los llevaba la hembra
con olor de la historia
entre la piernas/ entre las manos
entre las masas y hacia la calle
(y el amor) con el pueblo
a los gritos, oh escandalosa.
EVITA (le decían) evita
hacer olas, y Evita no evitaba:
oleaba, olía, el celo de la gente
la arrastraba.
El arrastre de Evita: oh señora,
arrastra pro nobis.

Dicen mis amigos/ que mi vino es triste
pero ella vino (de venir)/ verbalizó:
Evita tú —me dijo— el vino entristecido
Evita (de evitar)
las noches largas
las amargas rachas
las tantas Nachas
dijo Evita y vino (de venir)
conjugó el verbo
invitó el vino (de beber) bebió/
bendijo/ el agua de las fuentes
las patas de las fuentes
las manos de los fuegos y
metió/ las manos en el agua
el agua en el fuego
el huevo en el agua
(ponía huevos Evita) y
con éste le puso sal/ con éste
le puso amor y con éste sí,
con éste (les dijo) no
a los Pícaros/ no a los Gorditos
Evitó que los Pícaros Gorditos
se
lo
comieran
Todo.

Después tendió
la mesa en la plaza
dio de comer (no a las palomas)
dio de creer en el plato (no a los creyentes)
en la plaza
Y un día dijo (Evita dijo): Eviten
sacar los pies del plato pero
—sobre todo—
NO SAQUEN NUNCA LAS PATAS DE LAS FUENTES
(Hay que volver a las fuentes, revisó
el re-visionista que re-veía).
Dijo y decía mi madre: Evita (de evitar)
las malas (cuídate Juanito de)
las malas compañías
—carteles grandes/ grandes compañías—
dicen: EVITA elegir/ elige EVITAR dicen
evita/ las salidas de fábrica
las camisas salidas
los descamisados
Evita/ los descamisados (y no sólo):
no te descamises
no te descarriles
no te amontones
EVITA (de evitar) los amontonados:
te tocan (de tocar) o te toca (de morir)
como le tocó a aquél o al otro
por amontonado. Evita, evita entonces.
Si evitas —digo, decían—
si EVITA fuera o sería
o viviera sería pero
eso
es
“lo que hubo de haber habido”/
decía El Que Te Dije/ porque ya
No Es (de to be: ser o estar)
por que el verbo se hizo cáncer
(la carne dejó al verbo sin sujeto/
sin sujetar/ se soltó sola)
y deshabitó entre nosotros:
Y HUBO OTRO SILENCIO ASÍ.

Pero EVITA —decíamos— evita los temores
los tumores
la mala sangre
la mala leche de los años en tres
la coartada de volver, de ser millones de montones
no te vayas no, carajo:
aparta de mí esa hora/ las veinte y veinticinco/
no entres/ no salgas a la inmortalidad/ evita
EVITA las inmortalidades, evita/
Lo Inevitable.

Y colorín (Evita —dijo— la moraleja)
colorado (evita la queja, la moda vieja)
este cuento se ha
No acabes, compañera: Evita, no te
Entregues, no te vayas
aguanta todavía/ otro día/ peronista
no te calles compañera
porque hubo/ había una/ dos veces
un verbo bien dicho y conjugado
Conjugue, compañera
descamise/
renuncie, funde/
dignifique, compañera
Evite el silencio: preséntese
Preséntese que
se siente
se siente todavía
bajito se siente, se siente.

lunes, 3 de mayo de 2010

BICENTENARIO Y EL PENSAMIENTO NACIONAL

"Bicentenario y el Pensamiento Nacional"Tipo: Educación - Conferencia
Fecha: Martes, 11 de mayo de 2010
Hora: 19:30 - 21:00
Lugar: sede del Rectorado de la Universidad Nacional de La Plata
Calle: 7 e/47 y 48
La Plata, Argentina


Descripción .La Cátedra Libre del Pensamiento Nacional de la Universidad Nacional de La Plata y el Centro de Estudios Juan José Hernández Arregui tienen el agrado de invitar a usted a la charla sobre "Bicentenario y el Pensamiento Nacional", que se desarrollará en la sede del Rectorado de la U.N.L.P, sita en 7 entre 47 y 48, el día martes 11 de mayo de 2010.

Disertarán sobre el tema los escritores Francisco José Pestanha y Eduardo Rosa.
Francisco José Pestanha es docente universitario y ensayista. Es secretario académico de la Comisión Permanente de Homenaje a FORJA y Presidente del Instituto de Estudios Estratégicos Malvinas, Patagonia e Islas del Atlántico Sur. Es coautor de "FORJA, 70 años de Pensamiento Nacional" en tres tomos editado por la Corporación Buenos Aires Sur, y autor entre otras obras de "¿Existe un Pensamiento nacional?".

Eduardo Rosa es militante del campo nacional y popular, historiador, ensayista, hijo del gran historiador revisionista José María "Pepe" Rosa, integra el Colectivo "Pensamiento Nacional", participando de charlas abiertas y publicando textos con el fin de despertar la conciencia crítica de los lectores a través del análisis y la interpretación pormenorizada de variados temas que hacen al interés nacional.

Esperamos contar con su presencia.